Cincuenta intendentes reunidos
con Scioli en Mar del Plata, reclamaron que el ministro de Interior y
Transporte de un paso al costado, se endose al motonauta y vaya por la
gobernación.
El reclamo orgánico para que
Florencio Randazzo haga un renunciamiento histórico a su precandidatura
nacional y se encolumne detrás de Daniel Scioli para competir por La Plata va
tomando cada vez mayor cuerpo, esta vez, fogoneado por el propio gobernador
bonaerense.
En un congreso en Mar del Plata,
Scioli se llevó no solo el aval de medio centenar de intendentes a su
nominación sino también un reclamo unívoco al resto de los “presidenciables”,
entre ellos Randazzo: la necesidad de soldar las chances del Frente para la
Victoria a una candidatura única y consensuada, frente a la amenaza macrista y
massista.
“En noviembre yo apoyaba la idea
de la interna, pero hoy necesitamos un presidente de consenso que nos lleve al
triunfo”, se pronunció el jefe comunal de La Matanza y cabeza del PJ
bonaerense, Fernando Espinoza. “Tenemos que mostrar un candidato, todos son
excelentes candidatos, pero no todos llevan al triunfo”, subrayó.
El reclamo no es nuevo pero si ha
escalado en jerarquía partidaria y referentes del Frente en cuanto a voceros.
La semana pasada, la nota la había dado el vice provincial, Gabriel Mariotto,
cuando suscribió a la candidatura de Scioli dejando a un lado sus diferencias
del pasado. Mariotto endosó entonces un acuerdo Scioli-Randazzo para no
entorpecerse mutuamente y pensar en forma estratégica las PASO y octubre.
“Es una fórmula de lujo. Daniel y
Florencio son los mejor posicionados. Les tengo un gran respeto y cariño a
ambos y las diferencias que tengo con ambos son las que van nutriendo al
peronismo. Nos completan, pero no nos distancian”, le dijo Mariotto al diario
La Capital, casualmente de Mar del Plata.
Al igual que Espinoza, Mariotto
estuvo presente en el cónclave bonaerense en la ciudad balnearia donde el
debate sobre candidaturas volvió a asomar. Aunque la excusa del congreso era
disertar sobre descentralización de las fuerzas policiales, la verdadera rosca
política no comenzó hasta concluida la cumbre y con unos 50 intendentes que
participaron de una segunda reunión fuera de agenda y de unos 20 minutos de
duración junto al gobernador y su vice.
“Yo no estoy peleando para ser
candidato, estoy peleando para ganar las elecciones y en definitiva va a ser la
gente la que decida”, les aseguró Scioli a los presentes. Del otro lado, le
respondieron con un planteo que entusiasma al motonauta aunque poco y nada a
Randazzo: “Tiene que haber un solo candidato”.
Los fundamentos del reclamo los
dejó en claro Espinoza, según trascendió: la multiplicidad de nombres sugiere
un pluralismo interno en el FPV de cara a la sociedad pero lo debilita frente a
sus chances reales en las nacionales donde el Frente Renovador y PRO ya tienen
a su candidato único haciendo campaña.
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