El
cambio climático es una realidad que afecta directamente a las comunidades
indígenas. Esto se ve en el impacto que genera en actividades como agricultura
y pesca, y por ende en su seguridad alimentaria y en su índice de desarrollo
humano.
Así lo sostuvo Francisco Santa
Cruz del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) durante su
presentación en el Foro “Derechos de los Pueblos Indígenas y Cambio Climático,
Retos del Siglo XXI”, que tuvo lugar el 8 de agosto en el Congreso de la República.
El especialista precisó que entre
el 2008 y el 2012 “los efectos del cambio climático se duplicaron en la Amazonía peruana”.
Explicó además entre el 2005 y el 2010 se registraron mega-sequías, así como la
mayor crecida de río el 2012.
El índice de desarrollo humano
fue ideado con el objetivo de conocer, no sólo los ingresos económicos de las
personas en un país, sino también para evaluar si el país aporta a sus
ciudadanos un ambiente donde puedan desarrollar sus proyectos y condiciones de
vida.
En ese sentido, en el caso de
Perú las poblaciones con menor índice de desarrollo humano se ubican en la
sierra y selva, detalló Santa Cruz.
La organización del foro estuvo a
cargo del Congreso de la
República conjuntamente con el Instituto de Derechos Humanos
y Desarrollo (IDHDES) de la
Universidad San Martín de Porres, y Derecho, Ambiente y
Recursos Naturales (DAR).
En representación del primero
estuvo presente la congresista Marisol Pérez Tello, quién resaltó la necesidad
de que el Estado garantice un ambiente sano, sin frenar la inversión y el
desarrollo de los pueblos.
Acciones inmediatas
A la cita también llegó Gladis
Vila, presidenta de la
Organización Nacional de Mujeres Indígenas, Andinas y
Amazónicas del Perú (ONAMIAP), quien hizo un llamado a la inmediata acción del
Estado, articulando acciones y orientando financiamiento para la adaptación al
cambio climático sobre la salud, agua y seguridad alimentaria.

Por su parte Elizabeth Zea
Marquina, directora de IDHDES, expresó su preocupación por la protección de los
derechos de los pueblos indígenas, en igualdad de oportunidades y sin
discriminación.
Recalcó en ese sentido que estas
condiciones son urgentes más aún cuando ellos dependen de la preservación de su
territorio, que está siendo impactado por los efectos del cambio climático.
Asimismo, la directora ejecutiva
del Fondo Nacional del Medio Ambiente (FONAM) Julia Justo, advirtió la
necesidad de decisiones políticas para que la gestión pública oriente
presupuesto a la adaptación.
Más fondos para adaptación
A su turno Iris Olivera,
especialista de DAR, recordó que el cambio climático tiene dos frentes de
acción: sobre la mitigación (para la reducción de emisiones) y adaptación (para
los efectos del cambio climático).

Sin embargo, señaló la experta,
con el informe del PNUD se constata lo que ya han expresado y viven los pueblos
indígenas sobre la urgente necesidad de abordar la adaptación; tema que debe
convocar a más sectores y actores del Estado, articulados en sus funciones y
competencias, con indicadores claros, presupuesto, e institucionalidad.
Servindi, 13 de agosto, 2014.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario