El 17 de marzo de 1978, Horacio Domingo Maggio logró
escaparse de la ESMA. Había secuestrado por una patota de la dictadura el 15 de
febrero de 1977. Era delegado gremial y militante de Montoneros.
Una vez en libertad, Maggio envió cartas a periodistas,
autoridades eclesiales y diplomáticos. Denunció la existencia de centros
clandestinos de detención, los secuestros, las torturas, las desapariciones y
los vuelos de la muerte. Aquí compartimos ese documento fundamental en las
denuncias contra la dictadura.
Ante la divulgación en el exterior de su carta, las fuerzas
armadas lanzaron una cacería sobre Maggio. El 4 de octubre de 1978 fue
asesinado por un grupo de tareas. La dictadura también desapareció a su esposa
Norma Valentinuzzi.
Treinta años más tarde se encontraron inscripciones de
Maggio en las paredes del Casino de Oficiales de la ESMA: allí donde había
estado desaparecido.
Sus denuncias ayudaron a difundir los crímenes de la
dictadura argentina en todo el mundo. Y luego se transformaron en pruebas en
los juicios de lesa humanidad.
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